CELEBRANDO LA VIDA Y LA AMISTAD: HOMENAJE A ISABEL
Cuando recibimos una invitación para el aniversario de una persona que conocemos casi desde los inicios de nuestra conciencia, en la niñez, y que es de nuestro querido pueblo allende los Andes, ahora radicada en la capital, Lima, nos invade una mezcla de alegría y nostalgia. En su tarjeta se lee:
"Hay momentos especiales en la vida, que son especiales por si solos. Compartirlos con personas que aprecias y quieres los hace mágicos e inolvidables. Gracias por acompañarnos en este día tan especial."
Esta invitación es más que una celebración; es una declaración pública de amistad y aprecio.
¿Cuántas veces en la vida hacemos esta
declaración? Muy pocas. Al recorrer nuestra vida, nos damos cuenta de que
nuestra amistad es profunda, sincera y valiosa.
En nuestra memoria compartida, casi el 80% de los
recuerdos tienen que ver con la infancia, la adolescencia, y un poco con la
vida en la capital, pero casi siempre relacionados con nuestras actividades en
el pueblo: fiestas patronales o algunos aniversarios.
Recuerdo cuando, a mis 6 u 8 años, desfilabas
sobre un camión como reina de belleza. Desde entonces, pasaron muchos años
antes de retomar el contacto contigo en Lima. Tuve la suerte de tenerte en casa
durante mis cumpleaños. Sabía que eras muy amiga de mis hermanas y que los
lazos entre nuestras familias, afianzados desde nuestros padres hasta nuestros
abuelos, se convirtieron en relaciones entrañables.
Ciertamente, la vida es tan impredecible que no
sabemos cuándo estaremos en condiciones de no poder ni siquiera caminar, o de
compartir una sonrisa, mucho menos de disfrutar un buen zapateo con banda. Si
llegara ese momento, seguro añoraríamos habernos reunido más, habernos contado
más de nuestras vidas, o haber abierto el baúl de los recuerdos más a menudo
para revivir nuestra niñez, adolescencia y demás momentos juntos.
Igualmente, pocas veces nos reunimos para dar un
reconocimiento cuando se trata de éxitos, pero sí lo hacemos cuando se trata
del velorio de un amigo, desplazándonos cualquier distancia para expresar
nuestra solidaridad. En esos momentos decimos: "Qué bueno era."
Entonces, ¿por qué no celebramos o reconocemos a
las personas mientras están vivas? Es injustificado no hacerlo.
Por eso, hoy nos sentimos felices de esta
invitación, que nos permite reiterarte nuestra amistad, tanto personal como
familiar, forjada en nuestro alegre barrio de Venecia en Chiquián, nuestro
lugar de nacimiento, y recordar también a nuestros padres, quienes construyeron
esta amistad y familiaridad infranqueable.
Hoy, en tu aniversario, queremos decirte que eres
una persona exitosa profesionalmente, una amiga increíble, y sobre todo, una
gran madre. Estamos seguros de que tus hijas, tu hermana y toda tu familia
quieren compartir con nosotros ese cariño y reconocimiento que te tienen, y que
también es nuestro. Y estamos convencidos de que te sentirás más contenta si
están presentes las personas especiales para ti, como dice la amable tarjeta de
invitación.
Así, Isabel, hoy estamos aquí en tu cumpleaños
para decirte que eres una amiga, y que tú, junto a tu familia y tu historia,
son mentores de la nuestra. En el corazón de nuestra familia, te queremos y
valoramos tu dedicación, sinceridad y amor hacia tus amigos y hacia nuestras
tradiciones. Te llevamos presente, aunque no nos veamos con frecuencia debido a
las exigencias del trabajo, la seguridad y la salud.
En este aniversario, recibe nuestra alegría y
aprecio por la amistad que nos une.
¡Feliz aniversario, Isabel!
Tu amigo,
Acucho
CELEBRANDO LA VIDA Y LA AMISTAD
En las
montañas donde el cielo besa la tierra,
donde la infancia pintó sus primeras memorias,
allí, entre prados, y juegos, nació nuestra amistad,
forjada en el barrio y el alma, duradera
y sincera.
Isabel,
de la niñez a la vida adulta,
tu sonrisa, tu luz, han sido un faro,
desbrozando caminos, desde Chiquián hasta Lima,
llevamos contigo una amistad que nunca se apaga.
En los
recuerdos que el tiempo no puede borrar,
te veo desfilar, como reina radiante de emoción,
y aunque los años caminaron lejos,
cada reencuentro exige una canción.
La vida
es corta, incierta, un misterio,
no sabemos cuándo nos faltarán los pasos,
pero hoy estamos aquí, celebrando,
tu vida, tu historia, y todo lo que abrazas.
En tu
aniversario, alzamos nuestras voces,
por la profesional, la madre, la amiga tan fiel,
que ha sido un pilar, un ejemplo de fuerza,
y en cada corazón dejas tu huella, Isabel.
Que nunca
nos falte el tiempo para decirte,
lo mucho que significas para los que te rodean,
hoy, en vida, celebramos tu esencia,
y en cada sonrisa, nuestra amistad florece.
¡Feliz
aniversario, Isabel amiga!
Tu vida es una huella, un ejemplo que une,
y aquí estamos, juntos, en este día especial,
para brindarte todo el aprecio que te mereces.
La Pluma del Viento
Lima, 24 de agosto de 2024
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