CUANDO PIENSE EN VOLVER RECORDARÉ A PEDRITO SUAREZ VERTIS
No soy rockero, pero cuando alguien me recomienda, lo escucho, repaso sus letras y viajo en su melodía, al final me gustan. No soy de los que comprarían un disco para escucharlo. Hace unos años me ocurrió algo de eso, cuando estaba de visita en Jamaica, desde Lima me sugirieron que debía traerme música de Bob Marley. ¡Qué ignorante en música de rock!, me dije, cuando en el grupo de visitantes supe que estaban organizando un tour a la casa de este famoso jamaiquino de alcance mundial. Me pasé varias horas esa noche averiguando su vida, escuchando su música y leyendo sus letras, finalmente me encantó y mucho más después de visitar su casa y conocer su historia. Muchos años atrás había sentido esta falta de conocimiento musical, cuando visitaba los cuartos de mis amigos huaracinos, ellos eran amantes indetenibles de los Rolling Stones o los Beatles. Debo confesar que nunca se afianzó en mi ese gusto. La explicación podría ser que el apego a la música se da principalmente en la adolesc