GLORIA A PEREDO EN LAS ALTURAS
No lo conocíamos en persona, sin embargo lo sentíamos como
parte nuestra, cuando se trataba del
futbol, de la selección especialmente. Por ello fue muy doloroso enterarme del
fallecimiento del periodista deportivo, Daniel Peredo, mientras conducía mi
auto del trabajo a casa.
En el trayecto con lágrimas que rodaban por mi
mejilla, recordaba anécdotas de los muchos partidos que asistí por la televisión. Un recuerdo muy cercano fue en
las clasificatorias a Rusia 2018, en Quito, con su frase espectacular, muy de
su estilo, “Gloria a Perú en las alturas”, cuando ganamos 1 a 2 a Ecuador.
Ese grito, esa aclamación, era propio del
corazón de un hincha. E, era el que yo quería darle si estuviera en el campo, me
sentí, vivando, corriendo y llorando, Peredo me transportó a
ese lugar y me hizo vivir el triunfo, desde dentro.
Otra ocurrió, algunos años
antes en el Perú Argentina, clasificatoria 2010, faltando un minuto, perdíamos 1 a
0, y casi desde la defensa comenzó a trepar Vargas con la pelota en su zurda,
corría pegado a su banda, acosado por argentinos, que pugnaban por
detenerlo, pero el “loco”, con su brazo derecho se defendía. No se detenía
subía y subía, derribando rivales, de donde sacó tanto físico, si el partido
estaba en el minuto 90, no sé, pero él seguía. Su camiseta blanqui-roja
flameaba como la bandera nacional en lo brazos de Ugarte, hasta que llegó a la
altura del área, y sacó centro, fuerte casi rasante, los defensas centrales
celestes corrían acompañando el posible centro, sin embargo el centro los pasó,
y llegó justo al pie del delantero peruano, el gavilán Fano, que con la punta
de los dedos hizo el gooooool, increíble, un gol de pura garra, al último
minuto y a los creídos argentinos, fue de un sabor, y gusto indescriptible.
La narración
de Peredo, nos acompañó y transportó al estadio en una nave de epopeyas
griegas, y mientras viajábamos nos seguía cantando la jugada, “con la garra de
Vargas, con los huevos de Vargas, con la fuerza de Vargas “, nos convenció que
con esa entrega de jugadores como Vargas, se alcanzan sueños casi
imposibles.
Yo que he visto a Pocho
Rospigliosi en su programa Ovación, de radio y televisión, puedo decir que de
todos los narradores, Peredo, fue el mejor, el diferente. El decía, “yo no
narro partidos, yo transmito emociones”, qué cierto, qué grande, Cabezón.
Ahora que ha fallecido de manera tan
repentina, y en la plenitud de su profesión, el dolor es mucho mayor, y no solo
porque nos deja justo previo al mundial de Rusia, que el acompañó con sus
narraciones, y merecía estar ahí, para transportarnos en su peculiar nave
fantástica, sino principalmente por el
pesar y dolor que tendrá su familia e hijos menores por su ausencia, y ahí es
cuando los abrazos, el afecto, el sentimiento, el apoyo que le demuestre el
pueblo, a ellos es muy necesario,
hagámoslo, sin complejos, acudamos a su velorio, acompañémosle en su
recorrido por las calles, tributémosle el último abrazo a Peredo, de ese modo sus familiares sentirán menos el
dolor y sabrán que el pueblo lo tiene a Peredo en su corazón, y que sus hijos
se sientan orgullosos de haber tenido a un padre, que todo el Perú, admira y
querrá por siempre.
DANIEL PEREDO VUELVE
Dónde estás voz del deporte
Acaso te adelantaste a Rusia
Nadie como tú para vivar el gol
Imposible olvidar tu emoción
En cada gol de nuestro Perú
Lloramos con tus frases
Pero cabezón vuelve no te vayas
En nuestros corazones vivías
Rusia sin ti será incompleto
Engáñale al destino y vuelve
Dile que aquí está tu familia
O nárrales un partidito y vuelve
Perú si no sufre no vale
En tu voz la historia vivirá
Radio televisión y periódicos
Unidos te recordaremos por siempre
La Pluma del Viento
Lima, 19.2.2018
La esposa de Daniel Peredo
El gol de Fano ante Argentina... narración de Daniel Peredo
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