NÚMEROS Y HUMANIDAD
«Allí, desarraigados o abandonados, ancianos vendiendo para sobrevivir. Cuerpos curvados, rostros gastados, enfrentan el destino cruel del olvido, sin importar el clima ni la oscuridad.» Esta semana, mientras caminaba por las calles de Lima —entre el eco colonial de sus balcones y el bullicio indiferente de la modernidad—, un anciano vendiendo dulces bajo la lluvia me detuvo en seco. Su mirada, cargada de historias calladas, me persiguió hasta la ceremonia donde recibí mi diploma, rodeado de jóvenes que brillaban como pantallas nuevas. Al día siguiente, en la llegada del día, desde mi punto de apoyo, escribí «Números y Humanidad» : un poema que nace del conflicto entre mi pasado de científico (criado entre ecuaciones y silencios: mi ser tecnológico) y este presente donde la vejez, la soledad y el abandono se alzan como cifras que nadie quiere sumar (mi ser humano). ¿Por qué compartirlo hoy? Porque este poema no es solo mío. Es de los abuelos olvidados en las ace...