A don Marco Antonio Zuñiga Gamarra Padre Ancashino 2003
Es oportuno que en este día, el destino me haya llevado lejos, para que entre mi soledad y la investigación, pueda comprender y expresar el amor que te tengo mi querido hermano, bastaría tener la misma sangre para que este aprecio sea justificado, pero en tu caso se agranda..
Mientras abro el libro de la vida veo entre sus primeras paginas, las experiencias de niños que pasamos juntos. Allí está tu escuelita querida el 378, con don German Romero tu profesor, donde también estuve pero duré poco, pues tu habilidad al estudio, seguramente opacaba mi capacidad, y me alejé a la escuela rival, mi recordado 351, tu prematura madures se reflejó en tu abnegada colaboración con mama Luchi, en los quehaceres con las vacas y animalitos domésticos, a pesar de ello tu extraordinaria capacidad en el estudio lo notaba cuando a veces cargado en los brazos de don Fabián Cano, tu director, le expresaba elogios directos a nuestra madre.
Sigo pasando las paginas veo la alegría de nuestra madre, al recibir el recorte del periódico La Prensa, donde apareces en la Televisión en un diálogo con el gran escritor López Albujar.
Tu ingreso, sin perder un año, a la UNMSM a medicina, corroboraba tu prodigiosa habilidad al estudio. Hoy entenderíamos que eso seria natural en un hogar donde nuestro padre Antuco Zúñiga era amante de los libros y la lectura.
Tu responsabilidad era tan de maduro que a pesar de estar lejos de nuestros padres, te matriculaste a la Academia de preparación, cuántos ahora lo harían?.
Cuando me tocó llegar a Lima, ya a finalizar mis estudios de secundaria, tú un estudiante universitario, me permitiste que estudiara también en la academia de preparación, lo pagabas con la propina que te ganabas en la tienda de nuestros queridos primos Alarcón, de modo que gracias a ti pude hacer mis estudios universitarios, y que alegría guardo hoy, cuando a modo de pago en una noche que volvías de la universidad, seguramente preocupado por mi examen de ingreso a la UNI, te recompensé con mi Segundo Lugar en la Tabla General de Postulantes, hoy como si fuera ayer veo tu imagen de hermano y padre, por ello si en este país tan competitivo me encuentro ensimismado con la investigación de cosas que nosotros no lo aprovecharemos sino nuestros hijos y nuestro nietos, lo debo a tu esfuerzo en el momento oportuno, hoy a la distancia pero cerca del corazón debo expresarte querido hermano lo grande que fuiste antes de ser médico y cuanto más te has elevado ahora que con tu cuidado ya no solo encaminas la vida de los tuyos como padre sino también salvas vidas, y salvaste la mía.
Tu hermano que te abraza y felicita por esta merecida designación y homenaje.
Acucho
Columbia Junio de 2003
Dr. Agustín Zúñiga Gamarra
Ciudad de Columbia
Universidad de Carolina del Sur
Departamento de Ingeniería Eléctrica
Estados Unidos de Norte América
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