CORONAVIRUS LA PREVENCIÓN ES LA LIMPIEZA

Hoy salió el presidente en la TV a escala nacional, anunciando el primer contaminado en el Perú, con el virus COVID -19 (coronarivurs). Mi primera sensación fue de preocupación, me había documentado sobre el virus, días antes, sobre su: origen, contaminación, propagación, y letalidad. Siempre intentando, ser riguroso, con la fuente de información, preferentemente de científicos o de la OMS. Este ultimo me pareció menos claro, sin embargo algunos medios de difusión como EL PAIS, de España, sacó una resumen muy bueno. Ese resumen lo pegué en mi muro de Facebook. Y, parte de ello lo expuse en mi programa de radio.

Mientras no llegaba al Perú, parecía que lo tenía bajo control, personalmente. A pesar que en mi entorno cercano, tengo personas, consideradas del grupo de mayor riesgo, donde la letalidad de 2 a 3% tiene mayor probabilidad. 

Por lo que cuando se me dio la oportunidad de ir a un supermercado, el sábado, compré  alcohol en gel antibacteriano y pañuelos descartables. No compre mascarillas, talvez porque no habían.  

Esta vez, por esas cosas que tienen las probabilidades, no fui a trabajar, por lo que la noticia del Presidente lo cogía en directo, mientras me alistaba para salir a la universidad. Entonces me paralicé,  la noticia la esperaba (la contaminación), pero no tan pronto, pensé que podría ser en 2 semanas. 

Así que, lo primero que percibí en su semblante fue de preocupaciòn como que fuera algo muy serio (no me dio tranquilidad si ese fue su propósito). Con eso los periodistas ávidos de noticias inmediatamente sacaron sus cámaras hacia las farmacias. Preguntando por el precio de la mascarilla, le contestaron, 25 soles la unidad, lo que antes costaba 5 soles. Claramente una locura. 

Luego preguntaron a la gente, "si ya compraron una mascarilla", la mayoría estaban paradas en la puerta preguntando por mascarillas. Los periodísticas insinuaron que debían comprar mascarillas, lo cual no debía hacerse. 

Ahora, me encuentro en el centro comercial de San Miguel, en un famoso restaurante. Desde mi asiento veo comensales chinos en número de 6, al rededor de una mesa, distantes en otro ambiente, separados por vidrios. Empero, reconozco que estoy inquieto, no tranquilo, no me gustaría estar cerca de ellos. También, me gustaría preguntarles de donde vienen. Incluso, quiero ver al mozo que los adtiende, para evitar que sea el mismo que me atienda. Con esto quiero decir que la razón se ve superada por la emoción. Aunque, de golpe me corrijo, no puede ser, lo que estoy pensando. Si sé que la mejor prevención es la limpieza, pero también uno de evitar la gripe usual, porque te pones en condiciones de desventaja, dado que tus defensas bajan. Así que sintiendo un poco de frío dada las corrientes de aire muy fresco que en este restaurante,  medio balcón, se está dando,  decido levantarme e ir a comprar una casa, o cambiarme de lugar hacia otro donde no corra mucho aire. 

Chau,coronavirus, no te voy a dar la oportunidad de atacarme.  

Lima, 06 de marzo de 2020